"De La Cueva a B. A. Rock, de B. A. Rock a Madrid, de Madrid al cielo. El Espíritu Celeste a través de la partitura del recuerdo, de aquel Buenos Aires mágico".
Javier Vargas es madrileño de casualidad. Hacía poco que sus padres, emigrantes de Argentina, habían vuelto. Y nueve años más tarde tendría que volver a residir con ellos en Mendoza, San Luis, Buenos Aires y Mar de la Plata. Paseando por la Avenida de Mayo bonaerense conoce a Tanguito, la leyenda, o Ramses VII. Allí fue donde prendió su pasión por la música y la guitarra. Conoció de primera mano a los pioneros y protagonistas del rock argentino. Cosa seria. Estuvo en La Cueva, mítico garito donde todos se reunían para zapar, improvisar, soñar.....en un clima irrespirable de represión y terror. Asiste al B. A. Rock, festival emulo de Woodstock a lo porteño, emblema del rock progresivo argentino y uruguayo. Se empapa de los más grandes : Almendra, Manal, Pappo's Blues, Litto Nebbia, Vox Dei, Moris, Sui Generis, Pescado Rabioso, Color Humano, Invisible o Billy Bond y la Pesada del Rock & Roll. Javier Vargas creció, luchó y se hizo un nombre. Primero en España, luego en el mundo.
Así que éste tributo al rock que lo formó como músico y persona, es más que justificable. Hay que ser agradecido a tus raíces, y con los Espíritu Celeste, (guiño a sinfo - prog banda, y a "la Janis" argentina), lo pone en marcha. Luis Mayo (voz, percusión), Juan Carlos Mendoza (bajo) y Miguel Ángel Cap (batería), lo forman. Vargas se encarga de guitarras eléctricas, acústicas y sintetizada, de manera más que destacada. Y alguna intervención estelar también tenemos.
Nos metemos en harina raudos, con "Avellaneda Blues", un clásico de Manal, el trío de power rock blues de Claudio Gabis. La respuesta argentina a Cream, y primer fichaje del legendario sello Mandioca, corazón del rock "de ashá". Ni que decir tiene que tanto el formato como el estilo, es perfecto para la banda de Vargas. Para "Viento Dile a la Lluvia", un indispensable de Los Gatos, cuenta nada menos que con su voz, el grandísimo Litto Nebbia (también a los teclados). Nebbia es, junto con Luis Alberto Spinetta, mis dos intocables del rock argentino. Y a lo que se ve, también de Vargas. Puro arte impreso en vinilo rock. Aquí el tratamiento "moderno" del ritmo no me convence demasiado. Ciertamente, no es mi manera de ver éste tema, pero bueno....si a Litto le gustó. ....Ahora llega "El Tren de las 16" del gran Pappo, el bluesman guitar - hero argentino por antonomasia. Y además con Germán "Mono" Burgos, portero del Athletic de Madrid y rocker argentino para más señas, poniendo su voz muy similar a la de Norberto Napolitano, mejor conocido en la galaxia como Pappo. Buenísima versión, aquí sí.
Palabras mayores de nuevo, con la tremenda "Post Crucifixion" de Pescado Rabioso. Un excelente single en su formato original, de la banda hard rock psicodélica de Spinetta. Tremebunda rendición. Y seguimos con "el Flaco", mi dios particular de aquellas tierras "pat - agónicas", con "Ana No Duerme" de Almendra, su primer y maravilloso grupo. Echo de menos la voz del gran Spinetta, ( y a él entero! ), es inevitable, pero es una gran cover, con un trabajo de slide extraordinario, a la Duane Allman.
Volvemos a Los Gatos con "No Hay Tiempo que Perder", una revisitación que conserva el beat / psych 60s, pero endurecido y actualizado al modo Vargas, muy bien. Spinetta está claro que también es el héroe para nuestro guitarrista. Ahora con ésa maravilla que hizo en solitario, "A Estos Hombres Tristes". La respuesta "rabiosa", pero siempre poética, de Spinetta a la sinrazón "milico". Seguimos con el grandísimo Flaco y sus Pescado Rabioso, en "Algo Flota en la Laguna", del "Desatormentándonos", debut de la banda. Hard psych blues de alto voltaje, que en manos de Vargas vuelve a crear vida hendrixiana. Cuenta la leyenda que "La Balsa", himno inmortal argentino, fue escrito por Tanguito en los baños de La Cueva. Que la escuchó Litto Nebbia, la acabó y le puso nuevas letras. Así es como fue el mayor hit de Los Gatos. Otra versión excelente. Spinetta es el claro ganador de éste homenaje, junto con ellos.
"Plegaria Para un Niño Dormido", (aún se me eriza la piel recordándo cómo la cantó su autor a dos metros de mí! ), se hace con respetuosa fidelidad y desbordante sentimiento. Quedan unas cuantas. "Natural" de Tanguito, "Todo el Día Me Pregunto" de Manal, "Hogar", "Sueña y Corre", "Escapando de Mí" (cómo me recuerda a Miguel Ríos, y cuánto aprendió de todos ellos!), de Los Gatos......Se nota que además de un " tributo al rock argentino", lo es a su propia infancia y adolescencia. Un afortunado que vivió todo aquello de primera mano y muy de cerca. Porque recordar tu pasado te hace mejor en el presente. Extraordinario.
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