La grabación se inicia con "Get Real", un maravilloso instrumental con sonidos "canterburianos"
Antonio: Quería que el ambiente en este tema tuviese ese sabor a los años ’70 que está un poco inspirado en sonidos a lo Kansas, Camel e incluso Deep Purple. Era importante para el comienzo del disco, hacer esa declaración de intenciones en cuanto al sonido y las referencias, porque le daban el carácter y la fuerza que necesita toda primera canción.
Un inicio con una rítmica interesante, con unos teclados analógicos, y una parte final con el bajo y la batería trabajando a tope, la guitarra con el wah wah y los solos de Hammond fantásticos grabados por Juanjo, y “voila”, ya tienes el primer tema del álbum.
Seguimos con la vitalista y alegre "Flying Caravan", todo un compendio de elementos progresivos. Teclados a lo Rick Wakeman o Andy Tillison (The Tangent), bajo a lo Chris Squire (sobre todo en la parte final), guitarras acústicas, gran labor de la batería y destaca la voz pura y cristalina de Izaga. No es habitual una voz femenina en este tipo de música. ¿Cómo se planteó incluir este elemento diferenciador en vuestra música?
Izaga: Para mí fue todo un reto puesto que yo venía de escuchar e interpretar estilos musicales diferentes. Por otro lado, siempre me ha gustado la música en general y, especialmente, indagar en géneros musicales de otras culturas, por lo que nunca me cerré a probar algo distinto. La extensión y complejidad estructural de los temas es algo que tiene en común con la música clásica y no solo no me resultó complicado sino que además me pareció muy interesante. No obstante, reconozco que en un principio me sentí algo intimidada por el estilo. El reto más grande fue adaptar las líneas melódicas de la voz principal a los temas ya compuestos.
Antonio: Izaga ha hecho un esfuerzo y un trabajo enorme por adaptarse a la tesitura de los temas, sabiendo que perdíamos gran parte de la capacidad vocal que tiene, en pos de esas tonalidades que ya estaban cimentadas en la armonía y en los arreglos desde hace años.
"Upstream to Manonash" se inicia con sonidos "Pinkflonianos" para transformarse sin casi darnos cuenta en la mejor versión de Camel con un Antonio Valiente lleno de sensibilidad en sus dedos y en su guitarra. Brutal
Antonio: Sí es un poco un blues a lo Pink Floyd, siempre con las referencias de Camel en la cabeza y por supuesto de Andy Latimer, que es uno de mis grupos y guitarristas favoritos. El colchón de los teclados, el bajo y la batería, hacen que la voz de Izaga brille con mucha expresividad y preparan el camino para el melódico solo de guitarra.
Continuamos con "Love´s Labour Mislaid", todo suena perfecto, en su sitio pero con una gran sensibilidad musical. Vuelven los sonidos del "Canterbury" mezclados con excelentes voces. El pequeño solo de teclado de Juan José Sánchez es épico
Antonio: No voy a descubrir nada, diciendo que los teclados son un elemento fundamental para este estilo. A pesar de que el disco se compuso partiendo de la guitarra, siempre he querido que los teclados estuvieran no solo para aportar textura, sino también estructura a los temas y sabía que Juanjo, que es un teclista fantástico, además de un gran amigo desde hace más de 15 años, era el que mejor iba a interpretar lo que cada canción necesitaba.
Llegamos a uno de los platos fuertes del disco "The Bumpy Road to Knowledge", he de reconocer que en este tema el tiempo se ha parado para mí. Al finalizar su audición no me podía creer su duración (16:45), en mi universo tan solo habían pasado unos minutos. Todos los elementos antes mencionados están presentes en el tema y si a eso le incorporamos un magnífico saxo a lo Mel Collins, teclados a lo Marillion (en su parte final), flauta navegando entre sonidos "Latimer-Gabriel" y esa voz angelical que te engancha, completaremos un círculo perfecto.
Lluís: Este es uno de mis temas favoritos, creo que tiene de todo y está muy bien elaborado.
En lo que me toca como batería te diré que en la parte central con el saxo o flauta, dependiendo de la versión del tema, me lo pasé en grande. Antonio me dijo que quería una batería más libre sobre un 11/4 que cambiaba a un compás de 9/4. Era un reto para mí ya que nunca había tocado sobre esa sucesión de compases. Tenía el saxo sonando para la improvisación, ya que se grabó anterior a la batería y eso me animó a crear una conversación con él.
Antonio: Es una canción que pasa por diferentes momentos musicales y estilísticos, en la que llegamos a utilizar hasta seis tipos de compases distintos en sus casi diecisiete minutos. Se puede escuchar rock clásico, rock progresivo, tintes de jazz-rock y hasta sonidos folk irlandeses en el final del tema. Los pasajes de flauta y saxo son tremendos, están realmente inspirados y le dan una mayor amplitud a la tímbrica del disco. Me encantan los álbumes que tiene multitud de registros y aristas para que el disco sea capaz de seguir creciendo en su escucha con el tiempo.
Ya estamos preparados para escuchar la gran suite del disco, "A Fairy Tale For Grown-Ups" (36:01). Me gustaría que comentaseis esta composición para los lectores de Rockliquias.
Lluís: Comentaré algo sobre el proceso de grabación de este tema. Al ser tan largo y variado tuvimos que “trocearlo” en las partes que lo conforman. Todo se grabó en proyectos separados para que después fuesen montados en el mastering. Lo difícil era que en la mezcla cada tema debía tener la misma textura y sonido para no perder el hilo, es decir, que un tema no sonara muy grabe o agudo con respecto al siguiente, ya que eso se notaría en el montaje general de la canción. Igualmente, Antonio lo tenía todo muy bien estructurado y una vez hecho el proceso de mezcla el montaje en mastering no tuvo ningún problema.
Antonio: Desde el principio tuve la intención de hacer para el disco una canción que recogiese una historia sobre la que poder desarrollar una gran idea musical, a modo de los grandes temas clásicos de antes. Ya sabes, pensar en hacer una película en vez de un cortometraje.
La historia la saqué del capítulo 18 de la cuarta temporada de la serie “Doctor en Alaska” (Northern Exposure) de la que soy muy fan.
Es un capítulo genial donde aparece un personaje al que se le juzga por su apariencia, pero que tiene detrás una historia que contar. Es un poco lo que pasa en la sociedad actual, todo el mundo tiene una opinión sobre todas las cosas, aunque se tenga una gran desinformación. Eso provoca unos juicios de valor que no se corresponden con la realidad y que pueden llegar a ser muy injustos y a hacer mucho daño.
Musicalmente son siete partes que siguen un mismo hilo conductor y que van aportando muchos registros musicales distintos.
La primera parte, “Northern Lights” es un instrumental inspirado estilística y musicalmente en “Get Real” pero resolviéndolo de diferente forma y con algún guiño jazzero por momentos.
“Change of Revue” nos sitúa en la historia contada y cantada por Izaga entre una base de arpegios de guitarra y sonidos de cuerda en los teclados, a los que se suman la batería, el bajo y unos Hammonds que van cambiando la dinámica y la fuerza en el tema.
En la tercera parte “S.A.D.” (Solitude Affective Disorder), con una entrada liderada por los teclados analógicos y la acústica de 12 cuerdas, y donde por momentos Be Bop Deluxe sobrevuela el tema, hacemos una prosopopeya con la soledad, que se convierte en un personaje de la historia y donde musicalmente hasta se puede escuchar una Bossa Nova, que desemboca en un ambiente Pinkfloydiano con un solo de guitarra largo de más de dos minutos, retomando al final con la fuerza de la batería y el bajo el tema principal.
Hacia el minuto 21 y en un ambiente muy etéreo, comienza “The World Had Turned Over” (And I Couldn´t Hold On) con unos armónicos en la guitarra y un Hammond que sostienen toda la canción y donde Izaga desarrolla una maravillosa interpretación con la voz.
La instrumental “Moonlight Labyrinth” comienza con la entrada del bajo dando paso al resto de instrumentos, en este tema que comanda la guitarra entre sonidos de la escala menor armónica y un piano eléctrico con mucho groove.
Las voces inician “Second Thoughts” entre teclados, guitarras, y con el bajo y la batería marcando el camino de toda la canción. Cambios constantes de tono y una parte final con una crítica feroz en su letra, dan la entrada a lo que será la conclusión del disco.
Sonidos muy Genesis para el final de la suite, en el inicio de “The Sum Of Your Fears”, donde las voces se mantienen a dúo hasta el final, que llega con un crescendo en los instrumentos para cerrar los 36 minutos de canción.
Supongo que con la que está cayendo, será difícil programar una presentación oficial.
Antonio: El primer objetivo era editar el disco y eso ya lo hemos conseguido. Obviamente realizar una presentación y una gira siempre está en la mente de un músico que saca un trabajo nuevo, pero la situación actual condiciona y nos hace pensar a corto plazo, luego ya veremos.
¿Cómo veis el panorama musical en Alicante?
Pedro Pablo: Los locales de ensayo en Alicante están llenos y parece que hay bastante talento y multitud de estilos. Cuando yo empecé éramos muy pocos grupos y eso ha cambiado mucho.
Lluís: Alicante es un sitio con grandes artistas. Hay muchos músicos y bandas de muy variados estilos, pero lo que creo que suele fallar es en la unión de todos ellos. Supongo que eso sucederá en otros lugares igual, pero al menos en Alicante veo que se crean guetos entre bandas y se crea una especie de batalla, en vez de unirse entre todos, ya que este mundo es pequeño, al fin y al cabo.
También por su tema turístico hay muchas bandas de versiones, siendo un mercado copado solo por las típicas de hace años que se dedican a ello sin dejar espacio a otras a comenzar. Ello muchas veces genera una división entre bandas de versiones y bandas de música propia, cosa que no entiendo porque la música no es competición.
Al final cada uno va a lo suyo y se resume en que no hay unión para poder generar un circuito estable musical para el público.
Ya si hablamos de salas o la reacción del ayuntamiento a promover la música en directo y demás es otro tema.
Tenéis la ventana de Rockliquias para invitar a nuestros lectores a escuchar vuestra música
Pedro Pablo: Es un disco con un gran trabajo coral y con colaboraciones de mucho talento. Obviamente es un álbum denso, que gana con el tiempo y repetidas escuchas, debido a la cantidad de matices que ofrecen los temas.
Lluís: Ha sido un disco creado desde el corazón, sin ninguna pretenciosidad fuera de hacer algo real y divertido para todos. Creo que se puede percibir en la grabación el buen rollo que hubo en todo el proceso y como cada músico puso su grano de arena.
Igualmente, creo que hay que aplaudir a Izaga y a Antonio por su creatividad, fuerza y buen elegir en los músicos con los que querían compartir este viaje.
Considero que “I Just Wanna Break Even” es un disco atemporal y que esta definición le va a venir muy bien, tanto por el sonido logrado como por las composiciones que lo integran.
Antonio: Ha sido un viaje maravilloso, donde hemos disfrutado del trayecto, sin mirar demasiado el destino, porque lo realmente importante era lo que estábamos haciendo y como lo hacíamos.
Finalmente te diría que le des al play, cierres los ojos y trates de disfrutar de la escucha.