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LOS ESTANQUES - IV (2020/ Inbophonic)

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 Creo recordar que ya tuvimos por aquí a Crayolaser como sinónimo de originalidad dadaísta y estupendo-desconcertante álbum. De allí saldría Iñigo Bregel (voz, teclados, guitarra) y se juntarla con otra panda de vulcanianos, ahora desde Madrid, dando forma a Los Estanques. En 2017 editaron su primer pecado contra la realidad, "Contiene Percal". "II" y "Los Estanques" le siguieron, siendo aclamados como los nuevos Marx Bros del pop psych & prog surrealista.  En el Año Oficial de las Idas de Bolo, 2020, editaron "IV". Y claro, estaban en forma, para tan alocados días.  "No hay vuelta atrás" atrae recuerdos del rock arg spinettiano, en mi "molesta" opinión. Fernando Bolado sujeta riendas de bajo imperante junto a una batería sorpresiva, la de Andrea Conti. Mientras que ésa sibilina wah wah funk del guitarrista Germán Herrero construye un armazón donde una brass section se adueña de un excelente feeling zappero. Bregel canta

KALEVALA - PEOPLE NO NAMES (1972)

 Kalevala fue una banda que en su momento fue un detonante para producir un sinfín de experiencias sonoras de lo más interesantes, su debut refleja aquella época, era 1972 y como sabrán el germen progresivo estaba en la puerta de casi todos los países del mundo y Finlandia no podía ser la excepción, así que la banda sintió una fuerte influencia dentro de ello y aporto ese elemento dentro su mítica People no Names, una obra de grueso calibre sónico que coqueteaba con el progresivo por momentos y que alcanzaba cierto matiz en con el ART-ROCK. OJO no llegaba a tanto pero se aproximaba mucho, por ello muchos consideran a esta obra (me incluyo) como un ente de naturaleza "Prog Related". 



Debo decir que el álbum es muy interesante, bastante atractivo sonoramente, y está cargado además de mucha fuerza y sensibilidad, por ello se consigue una fuerte conexión entre el oyente y el álbum. People no Names es una maravilla de la época, se disfruta mucho, y su performance está a la altura de grandes eminencias progresivas. El sinfonismo se cuela entre los surcos, los arreglos elegantes giran dentro de ese vaivén sonoro, pero no alcanzan tocar terrenos más pomposos, el sonido que desprende este pastiche sónico es ecléctico, muy camaleónico y se puede sentir ciertas fusiones de folk, jazz, blues y rock, hay canciones rimbombantes y otras de una naturaleza progresiva sublime. No es un álbum perfecto pero tiene un "noseque" que atrapa mucho. 

El juego vocal de Saksala mas la ejecución instrumental de los Kalevala consigue ser una especie de simbiosis perfecta que da como resultado una obra de excepcional finura. En resumen puedo decir que este álbum alcanza un grado de perfección, cada pieza tiene una identidad propia, es un reflejo de todo lo que se vivía y se consumía en Finlandia (influencia del contorno) por lo tanto hay un grado de tecnicismo y una sobriedad dentro de su música. OBRA DE CULTO para mí.

Hacía mucho tiempo que no disfrutaba tanto de una performance, Kalevala es una auténtica banda camaleónica, y este debut es sencillamente una muestra de sus virtudes. Qué maravilla de posturas, que elegancia en sus arreglos, como se aferraran a todas las propuesto para crear piezas de innegable alma progresiva. Sin duda alguna una joya que los 70’s nos regaló. Obra obligada para los fans de los tempranos movimientos  progresivos y los eclécticos sonidos con alma de ART-ROCK. Si aún no has podido tocar las puertas de esta banda, esta es la mejor manera de impregnarse con ellos. El álbum tiene un gusto exquisito, sobrelleva los caminos enturbiados con gracia y se cruza entre el concepto del Crossover Prog y el eclecticismo progresivo por lo tanto si uno le presta la debida atención se pierda entre capas y capas de texturas sonoras. Es un bocatto di cardinali para sus oídos y alimento eucarístico para el alma. Arreglos opulentos, cambios de tiempos, fusiones vanguardistas y una estética sonora son las principales características del álbum. Obra más que recomendada y de enorme CULTO.



Kalevala es una banda Finlandesa que nace en el 69 bajo el nombre de Vienan y fue formada por: Juha Salonen, Remu Aaltone y Albert Järvinen , con dicha formación la banda logro registrar su única actuación en 1970 en el Ruisrock festival. Para este trabajo participaron Olli Ahvenlahti en piano, Raimo Wallen en flauta y Ile Kallio en guitarra acústica, este último participaba en la banda "HURRIGANES". En el 72 la banda cambia de "line-up" y la nueva formación seria: Markku Luukkanen (batería), Matti Kurkinen (Guitarra) y Harri Saksala (vocal) con esta nueva formación la banda saca a la luz su primer trabajo titulado People no Names.

El Hombre Polilla



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