Entrada destacada

STARDRIVE featuring ROBERT MASON - Stardrive 2 (1974 / Columbia)

Imagen
 Un viejo conocido de nuestra sección electrónica, con su obligado primer álbum del proyecto Stardrive , que ya reseñamos por aquí.  Robert Mason fue alumno de la Julliard School, además de la Princeton Electronic Music Center. Así que su preparación fue concienzuda.  Además, era constructor de sus propios modulares en primitiva, pero eficaz polifonía. Gracias a esto, conseguiría su propio sonido, sin tener que caer en texturas generalizadas por las grandes marcas de sintetizadores. En aquel debut de 1973, contó con músicos de sesión de altos vuelos, como Stephen Gadd o Michael Brecker. En este segundo asalto se lo piensa mejor y acorta gastos. Aunque no está precisamente,  rodeado de músicos incapaces. Howard Rego sustituye a Gadd en la batería,  que ya es sustituir. Mientras permanecen de la anterior formación, Jaime Austria al bajo y Harvey Sarch en la guitarra. Prescinde de percusionisita y vientos. Probables mejorías en su prototipo quizá le impulsaron al r...

CHRISTOPHE POISSON - Music Sky (1985-1997/ Gazul)

 Nada se sabe del francés Christophe Poisson y nada se hubiera sabido, si no se hubiera rescatado a título póstumo éste "Music Sky" que grabó en 1985. En 1986 Poisson muere brutalmente a los 33 años.Dejando éste legado para la posteridad, que Gazul desempolvó con todo acierto. Le acompañaban Alain Gaubert (guitarra), Philippe  Gisselmann (saxo soprano), Gil Garenne (synths, computadora, drum machine) y Christophe Poisson en composición,  arreglos y ejecución (imagino que de teclados).



El inicio de "Messe K" (12'07) induce tenebrismos experimentales muy cinemáticos. Con marcada influencia contemporánea que puede ir de Stockhausen a sus paisanos Heldon. Conseguidas percusiones, guitarra en vuelo rasante y fondos de oscuridad no apta para flojos de mente. Es una sensación grupal equivalente a Embryo, Popol Vuh, Kluster, Peter Frohmader, Dissidenten o Brave New World. Teclados y guitarra tejen una telaraña krautie de sorprendente calado emocional. Muy sugerente.

"Sophonie" (5'25) posee minimalismo apocalíptico, con momentos de un eskizoide Jan Garbarek. Para un interrogatorio en Guantánamo puede ser muy eficaz. 

"Marie Virginie T" (20'34) fusiona saxo en ataques de desquicie con una jungla electrónica ideal para Cyber-Predators en una dimensión cenobita Hellraiser. Parecerá una comparativa rebuscada, pero es que la música no es para menos. Ideal para acompañar con una lectura de Phillip K. Dick. Cosmic kraut de experimental calado y rarunos ambientes psicotrópicos,  de brillante ejecución improv-avant. En ECM hubiera tenido sitio perfectamente. Los sintetizadores Moog y Appa braman como bestias moribundas como respuesta al rugido de un saxo herido de muerte.

Y aquí terminaba el álbum oficial. Resulta que se agregan tres bonus tracks, casi un cuarto de hora más,  de material nada desdeñable.

"Experience 1" (4'31) podría ser un outtake de Conrad Schnitzler. De igual magia y magnetismo. Reiteración evolutiva de manual y sonidos muy bien elegidos. 

"Experience 2" (5'32) es más atmosférica y sinuosa. Quizá un homenaje a su admirado Richard Pinhas. Una fuerte influencia.

Por último "Experience 3" (3'48) introduce spoken word junto a piano y electronics imperantes. Casi vangelianos.



Dejando la incógnita de hasta dónde pudo haber llegado tan interesante músico. Todo un misterio, su obra y su vida.

J.J. IGLESIAS 




¿Te gustó el artículo? No te pierdas de los próximos artículos 



Vuestros comentarios son nuestra energía








Comentarios