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MacArthur – MacArthur (1973)

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 Otra de las bandas injustamente enterradas en el olvido, sin apenas información sobre ella, es desconocida para la mayoría de público rockero. De origen Norteamericano con solo 2 Lp's pero de categoría superior, pasarían sin pena ni gloria por los circuitos comerciales masivos. Realizaron un progresivo inusual en las costumbres del nuevo continente, con un trasfondo muy europeo en las estructuras compositivas, confunde y sorprende la procedencia del otro lado del charco. El derroche de calidad y creatividad es total, el potencial enorme y el virtuosismo patente, sin embargo no hubo continuidad. Su sonido se sostiene sobre una importante base de teclados, mayoritariamente sintetizadores moog y minimoog,  última tecnología del momento, que nos retrotraen a la memoria irremediablemente los muros de sonidos uniformes y punzantes que solían aplicar EL&P en sus años dorados. Composiciones técnicas arropadas por unas guitarras arpegiadas a ritmo muy atractivo, dan una nota más humana

THE DOOBIE BROTHERS - Minute By Minute (1978, Warner Bros.)

 Producido por el miembro honorario Ted Templeman, rey Midas que dio luz a varias de las exitosas grabaciones que se editaron dentro del pop y el rock de los 70, Minute By Minute es una obra que presenta la ya viva estampa de la melodía west coast de The Doobie Brothers. Este vinilo sería su primer número 1 en Norteamérica; quién lo diría cuando pocos años antes se veía obligado a dejar la nave el miembro fundador Tom Johnston.  



Funcionando inicialmente cual cuarteto en su elepé homónimo de 1971 (Tom Johnston, Patrick Simmons, Dave Shogren y John Hartman), y ya desde aquel entonces con Templeman produciendo sus grabaciones, cuando llega ese 1975 que marca la entrada de Michael McDonald en la banda, los Doobie tenían en su haber verdaderas piezas mayúsculas. En su segundo Toulouse Street (1972), por ejemplo, se encontraba “Listen To The Music”; mientras que “Long Train Runnin’” se incluiría en el siguiente The Captain And Me (1973) o “Take Me In Your Arms (Rock Me A Little While)” estaría listada en el quinto Stampede. 

De hecho, fue tras este larga duración cuando entra McDonald. El fichaje de este ex Steely Dan se sucede debido a un empeoramiento en la salud de Tom Johnston, al que una úlcera estomacal lo saca de las giras. El vocal y guitarrista continuará colaborando con el combo –cada vez menos, pues un ataque de agotamiento lo vuelve a dejar en el banquillo–, aunque Michael comienza a ser reconocido como la voz característica de The Doobie Brothers a partir de entonces.



Simmons y Hartman, acompañados por McDonald, el bajista Tiran Porter, el baterista Keith Knudsen y el guitarrista Jeff Baxter darán cuerpo al sexteto que grabe el octavo Minute By Minute –formación estable desde algunos discos atrás–. Se puede decir de este álbum que su cara A está dominada por las composiciones de Michael, mientras que en la cara B es Patrick Simmons el que escribe tres de las cinco canciones que se suceden en los surcos. Cada uno se ayuda de diferentes invitados, o incluso de otros miembros de los Doobie, a la hora de crear los nuevos temas; a la postre, de los diez finales, McDonald aparece en los créditos de seis y Simmons de cinco –sí, la cuenta es correcta, ya que “Dependin’ On You” es obra de este tándem–, alternándose las labores principales frente al micrófono. Kenny Loggins ayudará al antiguo Steely Dan a concretar el primer single del disco, “What A Fool Believes”, devolviéndole Michael el favor participando en el tema “This Is It” del Keep The Fire (1979) de Loggins. 



Y en el mismo año de lanzamiento del citado trabajo de Kenny, el Doobie Brothers igualmente aparece en la extensísima lista de colaboradores de uno de los álbumes claves de la historia del soft rock: Christopher Cross, original del artista de igual nombre. Volviendo a Minute By Minute, aclarar que no solamente de sus tres sencillos para la FM se podía valer el redondo; “Don’t Stop To Watch The Wheels”, la muy yacht rock “Open Your Eyes”, “How Do The Fools Survive” –atención a su brillante solo de guitarra que cierra la tonada– y, ante todas las demás, “Here To Love You”, son auténticas canciones imperdible, de las de obligada escucha.

por Sergio Guillén

sguillenbarrantes.wordpress.com



 

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