Entrada destacada

Puppenhaus – Jazz Macht Spazz (2009)

Imagen
 Una bestialidad de álbum que emerge de lo profundo del suelo para deleite de todos los amantes del Jazz Rock más desenfrenado e irreverente. Alemanes de pura cepa, gestores de los ritmos más intensos, vibrantes y creativos van entregados en copas de LSD mostrando su talento a tutiplén con una puesta asombrosa con mucho Crimson, con mucho Zappa, con mucho Colosseum. Cuna de la fecundidad progresiva en cuestión de arreglos. Entonados tributos de latón/bronce que hacen el viaje suculento. Flautas que cohabitan con los saxos dando ramalazos al cuerpo y el sabor dulce del ácido y el eclecticismo más puro logran producir al cuerpo una sensación muy cercano al éxtasis profundo, llámenlo "orgasmo máximum". Jazz Macht Spazz es una de esas obras que logran desprender virtuosismo de cabo a rabo Entre nosotros tenemos una exquisita obra maestra compuesta por una performance esmeradísima en donde se aprecian 3 puntos bien marcados: 1) Cambios de ritmos, 2) Arreglos virtuosos y 3) Pasajes

Steve Hillage ‎– L (1.976) (colaboración J.J. Iglesias)

En 1976, Steve Hillage ya era todo un reputado y seguido músico por la comunidad hippie herbolaria adicta al vuelo sin motor. Desde las aventuras mágicas de Uriel (plastificadas en el disco fantasma de Arzachel), a las maravillas instrumentales de Khan y las voladas en tetera de los Gong de Daevid Allen. Hillage era el abanderado de la cosmic music británica. Su primer y monstruoso album, "Fish Rising" (1975) fue como una reunión de viejos amigos para una barbacoa en la campiña de Canterbury en un finde. Miembros de Gong, Khan/Hatfield and the North o Henry Cow,  ayudaban a crear esta obra maestra.

Pero Hillage tenía en mente algo menos comunal, y más individualista para su segunda invasión sideral: "L" (1976).


Las recomendaciones de los propios fans hicieron que Steve se pusiera en contacto con otro GENIO con mayúsculas,  Todd Rundgren. Por entonces éste llevaba una línea esotérico -mística  similar, con sus excepcionales Utopía. Como era de esperar, hicieron buenas migas instantáneas.  Y Hillage se plantó con su pareja,  Miquette Giraudy (voces), en los Secret Sound Studios de Todd. Allá,  en el tranquilo poble de Woodstock. Que no sólo produjo el disco, sino que le proporcionó a todos sus Utopía en pleno.

John Wilcox (batería ), Kasim Sulton (bajo) y el brujo de los teclados,  (ya revisitado en ésta sección ), Roger Powell en el RMI Computer,  moogs y piano. Hay más.  Nada menos que la leyenda del jazz, Don Cherry, colabora con su trompeta, trompeta tibetana, campanas tibetanas, tambura y voz. También Larry Karush en la tabla. Y Sonja Malkine con un hurdy gurdy del siglo XV!

Por su parte Hillage, además de tocar su guitarra delay -glissando, se hace cargo de la synth Guitar, sintetizadores ARP y EMS y voz.
Seis temas. Tres versiones. Mucha magia y folclore hippie.
Grabaciones hechas sólo en Luna llena...Y mandanga de la wena en los cigarros!

"Hurdy Gurdy Man" (6'32) de Donovan, trovador de la primera división psych,  abre el album. Llevándose la bonita canción hacia territorios místicos más familiares para el ex Gong. Mucha levitación sintetizada. Don Cherry enciende los propulsores en etéreo viaje. Un sólo de guitarra excepcional. Hendrix encantado desde la otra dimensión. 

La cosa se une con "Hurdy Gurdy Glissando" (8'54), composición de Hillage y señora. Campanillas tibetanas te liberan de todo peso material. Ommmmmmm......Finura y elegancia en las seis cuerdas, mientras Roger Powell nos teletransporta con facilidad. Percusiones hindúes nos acercan al modus operandi de Embryo. Good Vibrations. Cambió brusco de Wilcox en los parches y bajo funk de Sulton. Esto último sería muy usado por Hillage en sus discos de finales 70. Paralelismos claros con Todd Rundgren's Utopía. Jazz rock cósmico. Gozada interplanetaria.

Sabores blues inician "Electrick Gypsies" (6'24), debiendo mucho en la forma de cantar a Daevid Allen. La guitarra, prima hermana de la de Manuel Gottsching.

La tradicional hindú "Om Nama Shivaya" (3'33) vuelve a poner el punto exótico. Aunque la kosmische instrumentación tenga nervio rockero. Algo de agradecer en el estilo de Steve Hillage.

"Lunar Musick Suite" (11'59) imagino que conecta directamente con "Solar Musick Suite", del disco anterior. Además de inspirar el nombre al famoso fanzine prog de los 90 que dirigió nuestro compi Alberto Torro. Qué tiempos... Para mí es la pieza estrella. Momentos espectaculares a lo Utopía. Don Cherry emulando a un alucinado Miles Davis. Y todo bajo un manto de teclados espectrales. Perfecto marco para los latigazos eléctricos de Hillage,  Que parece competir aquí con las vacas sagradas del jazz rock del momento. Dicese de Reports, Mahavishnus o Forevers. Pero a su personal manera, que gentes tan respetadas como Ozric Tentacles tan bien han sabido digerir.

Finalmente el tema de George Harrison "It's All too much" (6'26), perteneciente al alucinado "Yellow Submarine", es tuneado para las exigencias de los jefes Hillage and Rundgren. Uña y carne. Porqué no harían más cosas juntos estos dos? Su afinidad es completa.
Hasta en tiempos más recientes, ambos han flirteado con el "chunda-chunda" versión "seria", ejem....
Por fortuna, ambos siguen ofreciendo buenos conciertos en la actualidad.

Las revistas Q/Mojo situaron a "L" en el puesto 28 en la lista de los 40 mejores Cosmic Rock Albums. Y no seré yo quien lo contradiga. Porque, como todos sus discos de los 70, este álbum me encanta.

P. D. - " No soy miembro de ninguna sociedad en particular o religión. Si tuviese que definir mi creencia, diría que soy un músico.  Y estoy en busca de la relación entre música y filosofía " (STEVE HILLAGE)







Notasi te gusta el artículo compártelo (Facebook, Twitter, g+, etc) pulsando en

que está al final del artículo, de esta forma contribuirás a la continuidad del blog. Gracias

Comentarios