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Puppenhaus – Jazz Macht Spazz (2009)

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 Una bestialidad de álbum que emerge de lo profundo del suelo para deleite de todos los amantes del Jazz Rock más desenfrenado e irreverente. Alemanes de pura cepa, gestores de los ritmos más intensos, vibrantes y creativos van entregados en copas de LSD mostrando su talento a tutiplén con una puesta asombrosa con mucho Crimson, con mucho Zappa, con mucho Colosseum. Cuna de la fecundidad progresiva en cuestión de arreglos. Entonados tributos de latón/bronce que hacen el viaje suculento. Flautas que cohabitan con los saxos dando ramalazos al cuerpo y el sabor dulce del ácido y el eclecticismo más puro logran producir al cuerpo una sensación muy cercano al éxtasis profundo, llámenlo "orgasmo máximum". Jazz Macht Spazz es una de esas obras que logran desprender virtuosismo de cabo a rabo Entre nosotros tenemos una exquisita obra maestra compuesta por una performance esmeradísima en donde se aprecian 3 puntos bien marcados: 1) Cambios de ritmos, 2) Arreglos virtuosos y 3) Pasajes

VIRGINIA WOLF - Virginia Wolf (Atlantic,1986)

El porqué una banda formada en el área de Manchester en 1977 consiguió mantenerse al margen de la NWOBHM, es otro de esos misterios que le da motivo de existencia a ésta sección de "Los Otros".  Quizá se ocultaron en un búnker,  a la espera de mejores tiempos para su melodic rock. Lo cual llegó a pasar en 1986, con un flamante contrato nada menos que con Atlantic. Tras los obligados cambios de personal, en ese año Virginia Wolf estaba formado por Chris Ousey  (cantante solista extraordinario), Nick Bold  (guitarras), Jo Burt (bajo) y Jason Bonham (batería "hijísimo de", que ya venía de hacer una obra maestra para Airrace, con 17 años).



Los productores del homónimo debut iban a ser David Richards y Roger Taylor, demostrando el interés de Queen por las jóvenes formaciones melódicas británicas,  (Brian May lo haría con Heavy Pettin). Y ahí no acaban las conexiones, pues Spike Edney iba a aportar sus teclados invitados. La grabación se efectuó en tres emblemáticos  estudios : el Musicland de Múnich,  el londinense Eel Pie de Pete Townshend y nuestros ibicencos  Mediterráneo Studios.

Toda la primera cara venía firmada por el guitarra Nick Bold. Y "Are We Playing With Fire?" (quizá se lo preguntaban a sí mismos), entra con el típico sonido hi-tech del momento. Ese que adoptaron tambien Foreigner para su "Agent Provocateur". Y que Ousey se encarga de recordar con su indeleble sello, totalmente en línea Lou Gramm. Cancionaca que se amoldaba a las ondas como yo a Scarlett Johansson (si me dejara, que va a ser que no). La producción se naturaliza para "Make It Tonight", una rola perfecta para Def Leppard en esos días. Si tu viagra particular son los solos de guitarra finos, finos, filipinos, la erección puede ser peligrosa en éste disco. "Only Love" es otra gema AOR (nada de bisutería aquí ), que esconde una evidente deuda Survivor, lo que la hace brillar sin esfuerzo. Ousey rubrica excelentes momentos, comerciales, que no reñidos con el buen gusto. Como en "It's in your Eyes", con el saxo invitado de Andy Hamilton. Algo que no está alejado de Eric Martin en solitario, por su marcado acento West Coast. "Waiting for your Love " mezcla riffs Mick Ralphs con melodía vocal Soul,  reforzada por los coros de Tessa Niles y Linda Taylor (otra "hijisima"?....)

En la segunda cara los royalties andan más repartidos. Tres cortes de autoría Ousey / Bold, y uno para cada uno. La sección de ritmo se mantiene al margen, aunque se deja notar activamente con sumo gusto. "Livin' on a Knife Edge" lleva implícita intro tecladista de Edney, y al modo de la inaugural, esto atufa a Foreigner de esas fechas, cosa que no me molesta para nada. Aunque también podría formar parte del set-list de Magnum, por su opulencia pomper. Este disco guarda muchas similitudes con el "Shaft of Light" de Airrace, (y no sólo por el batería), y en "For All We Know"  tenemos una de ellas. Hecho curioso es que Spike Edney meta en mitad de los 80, sonidos de mellotron en ésta canción. De hecho queda un tema muy sinfo, casi Asia o Genesis del "Duke".

Nuevo volantazo en "Don't Run Away", donde el mobiliario estilístico es synth-pop AOR de envoltorio menos rockero del que deseara. La cosa se arregla en "Take a Chance" , excelente prototipo FM radio, con cercanías a Stan Bush, The Babys, Billy Thorpe o Streets. Y una guitarra que huele a Alex Lifeson de lejos. Cierra el disco "Goodbye Don't Mean Forever", otro fino exponente AOR de contagiosa alegría,  de ésa que gusta gastar el generoso de Jim Peterik. En conclusión,  un magnífico debut que hacía eones que no escuchaba, y que mantiene el buen recuerdo que de él tenía. 

Una gira ese año 86 acompañando a The Firm mantuvo a la familia Zeppelin algo unida. Y al año siguiente las expectativas no iban a ser menores con Kevin Elson (Journey, Europe) produciendo "Push", ( lo cual suena a guarrada gore). Continuación nada desdeñable , fabricada desde Berkeley, LA. Eso sí,  En la portada ya eran Virginia Wolf featuring Jason Bonham, (y el chatico sin componer ni una, con los cojones bien descansaos en la silla del kit). Imagino que por imposición papal de los vendetuercas del sello. Se veía venir que en el 88 apareciera el debut de Bonham. Y también la ruptura de Virginia Wolf.



Chris Ousey (y el teclados de "Push", David Jon Hinson ), reapareceran deslumbrando con Heartland. Y en el caso del primero, unos cuantos proyectos más. El registro gráfico en la portada de "Virginia Wolf" no hace justicia a la calidad contenida en sus dos propuestas, por supuesto, altamente recomendadas.

J.J. IGLESIAS



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