Entrada destacada

Puppenhaus – Jazz Macht Spazz (2009)

Imagen
 Una bestialidad de álbum que emerge de lo profundo del suelo para deleite de todos los amantes del Jazz Rock más desenfrenado e irreverente. Alemanes de pura cepa, gestores de los ritmos más intensos, vibrantes y creativos van entregados en copas de LSD mostrando su talento a tutiplén con una puesta asombrosa con mucho Crimson, con mucho Zappa, con mucho Colosseum. Cuna de la fecundidad progresiva en cuestión de arreglos. Entonados tributos de latón/bronce que hacen el viaje suculento. Flautas que cohabitan con los saxos dando ramalazos al cuerpo y el sabor dulce del ácido y el eclecticismo más puro logran producir al cuerpo una sensación muy cercano al éxtasis profundo, llámenlo "orgasmo máximum". Jazz Macht Spazz es una de esas obras que logran desprender virtuosismo de cabo a rabo Entre nosotros tenemos una exquisita obra maestra compuesta por una performance esmeradísima en donde se aprecian 3 puntos bien marcados: 1) Cambios de ritmos, 2) Arreglos virtuosos y 3) Pasajes

COMUS - To Keep From Crying 1974

Comus fueron una banda de acid folk inglesa de efímera existencia con tan solo dos trabajos en su haber. El aclamado First Utterance de 1971 y el menospreciado por la crítica: To Keep From Crying. Es precisamente con este disco que quiero romper una lanza y salir en su defensa porque me parece un trabajo único en su género y no existe una sola referencia dentro del folk-rock psicodélico que se le parezca. Así como el primer disco de Comus es un registro oscuro que encandila a los seguidores de lo lisérgico y yo francamente no le pillo la gracia, el segundo To Keep from Crying es un trabajo lírico y luminoso aunque bastante extraño con sonoridades vocales que imprimen una tonalidad próxima a la disonancia pero de un atractivo sin igual. Precisamente ahí es donde reside su encanto y originalidad. He llegado a ver incluso críticas que lo definen como un álbum horrible e insulso…lo cual es preocupante, y no sé si lo es el gusto de quién lo dice o parte de una superficial impresión del mismo. Duda me crea.


Yo tenía 20 años el mismo año que se editó este disco en 1974 y lo compré sin escucharlo solo porque me atraía la portada y vi unos créditos interesantes de la gente que lo interpretaba. Acababa de empezar los dos años interminables de mili. Un trago amargo que los de mi generación tuvimos que pasar en los estertores finales del franquismo (siguen en el gobierno por cierto) Dos años de vida casi perdidos que afianzaron mi absoluta desconfianza en el ser humano y anularon mi alegría si es que alguna vez la tuve. Primero los curas, luego el ejército, y más tarde los empresarios tuvieron el honor de convertirme en un descreído del mundo y en un pesimista profesional al que le encantan los Hermanos Marx. La sociedad española de 1974 trataba de reducirte a una mierda y casi lo consiguen. 

Viene esto porque este disco formó parte de aquellos años de tristeza infinita, de ignorancia supina y de mala sangre hispánica. Si no hubiese sido por la música, daban ganas de tirarse por la ventana. Sobreviví claro ya que solo se suicidan los optimistas y los de paz y amor. 

To Keep From Crying fue para mí el lado luminoso de la “fuerza”, el lado inocente, el bálsamo de la furia. Lo escuché hasta la saciedad y aún hoy me lo pongo alguna vez. Temas como Touch Down, Children Of The Universe, So Long Supernova o el que da título al disco, te transporta a una atmósfera encantadora, casi naiff. O como ver el Mago de Oz en un bunker bajo una guerra nuclear y pensar que estás en ese mundo de colorines híbridos ajeno a los horrores. La voz única súper aguda de la cantante Bobby Watson, casi infantil, se mezcla con el desasosiego de que hay una realidad por encima ya que el disco tiene impresiones ácidas propias de la psicodelia tardía de los ecos de los sesentas pero también un aire fresco, distinto a lo que se escuchaba por entonces. 

Cosa curiosa es que se editó en España nada más salir supongo que por el tirón que la Virgin Records tenía en nuestro país en aquellos años. Dato curioso son algunos de los colaboradores del disco como Lindsay Cooper (Henry Cow) o Didier Malherbe (Gong) en los vientos respectivamente. Un disco extraño y una postal de una época poco agradable en mi vida. Se lo debía.


Alberto Torró


Temas
1) Down (Like a Movie Star) 00:00
2) Touch Down 04:06
3) Waves and Caves 8:52
4) Figure in Your Dreams 10:26
5) Children of the Universe 13:37
6) So Long Supernova 19:16
7) Perpetual Motion 22:38
8) Panophany 26:46
9) Get Yourself a Man 27:17
10) To Keep From Crying 34:24
11) After the Dream 39:37
12) Fiesta Fandango 40:40
13) New Tide 44:30




Notasi te gusta el artículo compártelo (Facebook, Twitter, g+, etc) pulsando en
                                                                                         
que está al final del artículo, de esta forma contribuirás a la continuidad del blog. Gracias

Comentarios

  1. .....Y yo tengo tu copia en vinilo, esa que te acompañó en aquellos oscuros años. Que tanto se parecen a estos. Debería desempolvarla.

    ResponderEliminar
  2. No se si lo querría otra vez en vinilo. Me produce un bajón de ánimo solo de verlo. Lo tengo en cd claro....pero es que vendí todos los vinilos. Hasta los que me quemaban por dentro. El tiempo vuelve extraños los recuerdos. Unos dan risa y otros una pena insondable y eterna.

    ResponderEliminar
  3. Me ha encantado esta reseña. Gracias por compartir estos tesoros ocultos y tus sinceras y humanas impresiones y recuerdos, Alberto. (Grandes los Hermanos Marx, añado).
    Juan Diego Morris

    ResponderEliminar

Publicar un comentario