Una bestialidad de álbum que emerge de lo profundo del suelo para deleite de todos los amantes del Jazz Rock más desenfrenado e irreverente. Alemanes de pura cepa, gestores de los ritmos más intensos, vibrantes y creativos van entregados en copas de LSD mostrando su talento a tutiplén con una puesta asombrosa con mucho Crimson, con mucho Zappa, con mucho Colosseum. Cuna de la fecundidad progresiva en cuestión de arreglos. Entonados tributos de latón/bronce que hacen el viaje suculento. Flautas que cohabitan con los saxos dando ramalazos al cuerpo y el sabor dulce del ácido y el eclecticismo más puro logran producir al cuerpo una sensación muy cercano al éxtasis profundo, llámenlo "orgasmo máximum". Jazz Macht Spazz es una de esas obras que logran desprender virtuosismo de cabo a rabo Entre nosotros tenemos una exquisita obra maestra compuesta por una performance esmeradísima en donde se aprecian 3 puntos bien marcados: 1) Cambios de ritmos, 2) Arreglos virtuosos y 3) Pasajes
El sonido del mar Cantábrico revelaba en su choque frontal contra el cristalino atrevimiento del formato de Power Trío, que no entiende de cómodas ubicaciones específicas halladas en parcelas en las que surfear sobre espumas sin complejos, era la clave perfecta para contrastar respeto por la ironía en la interpretación de una serie de piezas que en clave de versión y a pesar de ser avistadas por el reconocimiento a leguas de la costa occidental asturiana, revelaban a Otus Scops como uno de los proyectos más interesantes de un plano que campa a sus anchas entre la inercia informal y la coherencia de un extraordinario gusto por la interpretación. Esto sucedía en el año 2014, cuando éstos tres mozos, alertaron a la escena sonora Astur con un primer trabajo discográfico que casi tres años más tarde, les convertiría en auténticos canallas del espectáculo y la inercia en la caza y captura de un público que hasta la fecha agradece la originalidad de sus discos y su puesta en escena, tan imprevisible como original.
El pasado año 2021, el trío regresaba al plano de la actualidad con un nuevo integrante en sus filas en sustitución del baterista que les acompaño desde sus inicios, y con una nueva propuesta de arriesgada sabrosura, donde la evolución de Otus Scops tanto en composición como ejecución les ha llevado a extensas pampas en las que no precisan esconder plumeros, para inhalar rosas de aroma letal, observando como el Cóndor se adueña del cielo en busca de la felicidad, mientras que amantes flamantes suspiran con elegancia por una España musical cada vez más acorralada por el miedo a apostar doble contra sencillo, en la autoría personal.
Este tercer disco gestado por los habituales Pipo Menéndez; guitarras y voz, Pablo Canalís; Bajo eléctrico, Whistle, tambores chamánicos entre otros elementos y las voces, junto con el nuevo baterista Iván Ortiz, quien ha ocupado la vacante del sensacional y entrañable Jorge cumpliendo notablemente con las expectativas depositadas en el, y al mismo tiempo, este nueva entrega ha contado con la colaboración de Miguel Herrero, el noble hidalgo del criterio creativo Astur, con su ineludible y colosal aportación en la sección de metales en la trompeta, y su magistral inclusión de Hammond B3 en temas como Rosa Letal y Amante Flamante donde también participa Daniel Herrero en los saxos tenor y barítono, con formidables arreglos del propio Miguel Herrero, quien ha su vez ha incluído guitarras acústicas en la pieza; La Felicidad. Hay que destacar también la aportación de Alejandro Ares en el Acordeón en el tema; Plumero de la Pampa, así como también hay que reseñar los notables arreglos de los tres magos de Occidente, quienes han apostado por traviesas sabrosuras de arquitectura eléctrica traspasando fronteras latinas y diversas delicatessen populares arraigadas a la madurez musical, la elaboración compositiva y un exquisito gusto por la consecuente interpretación.
El álbum posee un distintivo de producción tan uniforme como cálido, y tan redondo como musculoso por razones obvias de grabación y producción cuyo sello exclusivo lleva por nombre; Estudio Acme.
Otus Scops han cuajado un disco francamente redondo, dotado de compleja elaboración orientada hacia la elegante sencillez resolutiva. Han creado una sugerente rodaja en la que se han cuidado minuciosamente aspectos que van desde los arreglos instrumentales hasta los vocales, ante los que hay que quitarse el plumero en esa pampa, en la que al César, le corresponde lo que por mérito y derecho es exclusivamente suyo.
Más sabroso, esta disponible en las ponzoñescas plataformas digitales, pero poseer el formato físico, es más excitante y sugerente para una audición mucho más próxima quizá una justicia no del todo coherente, con una obra digna de ser publicada en Vinilo. No obstante, el disco no sobra como algo más que un mero objeto figurante en cualquier colección de un amante de la música que no sólo la practique, sino que también contribuya al aprecio.
Los Scops aman lo que hacen, sin mendigar otras formas en las que "AMAS"... Simplemente la doctrina de figurar.
Luis Arnaldo Álvarez (Baterista y Locutor profesional independiente)
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