Entrada destacada

Love Live Life – 殺人十章 = 10 Chapters Of Murder (1972)

Imagen
 No hay duda alguna que la visión de los japonés en los 70’s siempre ha sido algo digno de apreciar, hoy en día cualquier manifestación que deslumbra Japón en cuestiones de ARTE logra ser algo memorable, freak y hasta de una delicadeza bárbara. Este álbum es justamente eso, y me gustaría que ustedes puedan apreciar un poco más de esa performance que solo Japón sabe manifestar en su música.10 Chapters Of Murder - from Colin Wilson's Encyclopaedia of Murder es un álbum singular, quizás no logre ser extremadamente avant-garde pero logra llegar a un punto muy alto dentro de su concepto y se vuelve una experiencia fascinante.   Debo confesar que este álbum es una obra aun "fresca" para mis oídos y todavía no salgo por completo de su performance, sin embargo para mí esto es toda una aventura sonora al extremo pues es como navegar por ríos peligrosos, en si una verdadera experiencia. Si bien sabemos que los "conceptos artísticos" de los japoneses en ocasiones son bizar

WALTER GIARDINO - Temple (Polygram, 1998)

 Uno de los guitarristas al que más ha influenciado el instrumentista británico Richard Hugh Blackmore es el argentino Walter Giardino. Cuentan los cronicones –y el propio Giardino en una entrevista concedida en 2002– que tras foguearse con Rodolfo Cava, Yuli Ruth y Gustavo Rowek en los V8, ensayó con sus siguientes Rata Blanca durante dos años antes de presentarlos en las tablas. Su tenacidad y persistencia son únicas, señalando nuevamente al pasado del mentor militante en Deep Purple y Rainbow. 



Con su nave nodriza en forma de combo amante del hard rock marca un hiato de 1997 a 2002; realmente es una fractura, una disolución sin promesas iniciales de regreso. Walter se encuentra con una importante pila de canciones por amamantar en el fuego del estudio de grabación, sin banda como colchón y con ganas por la continuidad activa. En tres meses conforma las filas de acompañantes que le secundarían en Temple, un CD solista que siendo hermano de la discografía de Rata Blanca brilla con luz personal y respetable. 

Ya en “Corte porteño” se muestra natural de su tierra a la par que recreador de los Rainbow con Joe Lynn Turner (“Spotlight Kid”); incluye un solo que por muy Blackmore que pueda parecer está extraído del tango de Scarpino y Caldarella “Canaro en París”. “Los amigos del campeón” quisiese retratar a todas esas amistades de pega que durante años han bebido de las arcas e influencias del Pibe, el futbolista Diego Armando Maradona. “Astróloga” no es una versión, aunque calca con respeto, emoción y otra letra –para tirar balones fuera– los basamentos del “Self Portrait” setentas. 



Norberto Rodríguez canta siguiendo la escuela de un heavy melódico, directo y nada afectado, cambiando registros por los que adecentar cada estrofa dotándola del sentido último y esencial. Walter Giardino declararía que «el recurso de Ritchie Blackmore es tocar lo que tiene que tocar cuando tiene que tocarlo», definiendo así un talento del que con los años y discos como Temple este argentino demuestra poseer en su técnica.

por Sergio Guillén

sguillenbarrantes.wordpress.com










                     Notasi te gusta el artículo compártelo (Facebook, Twitter, g+, etc) pulsando en                                                                                      
que está al final del artículo, de esta forma contribuirás a la continuidad del blog. Gracias












Comentarios