Spock's Beard – The Archaeoptimist (2025 / Madfish)
Hace siete años, Spock's Beard nos sorprendió con un "Noise Floor" apabullante. Un disco imposible de unos Kansas que ya nunca veremos.
Ahora vuelven con "The Archaeoptimist", y me esperaba algo similar. Porque mientras Spock's Beard saben recrear el sonido de Kansas mejor que los actuales, su antiguo "jefesito" sólo hace el kansino. Eterno proclamador de homilías y sermones de tres horas, en discos inacabables. Agotador, ése hombre. No tiene medida de las cosas y es una lástima.
Con una bonita portada entre Hipgnosis y Hugh Syme, procedo al psicoanálisis de este sensacional álbum.
En los Beard debuta el nuevo batería Nick Potters. Siguen de la formación histórica Alan Morse (guitarra, voz), Ryo Okumoto (teclados, voz, producción), y Dave Meros (bajo, teclados, voz). Continúa el ex-Enchant (gran banda!), Ted Leonard, (voz solista, guitarra, teclados). Y que dure. Porque con él, Spock's Beard renacieron. Prácticamente todo el material está compuesto por Ryo Okumoto y Michael Whiteman. Letras de Leonard. Cantan todos, algo fundamental en esta propuesta.
Como vamos a comprobar en la intro a capella-Kansas total de "Invisible" (6'33). Ése órgano y desmesurada energía prog hard continúa excitando el nervio creativo de la banda. Okumoto es el líder y lo demuestra con increíbles pasadas de sintetizador asesino que clama venganza. Uno de mis actuales teclistas favoritos. Como solista es intachable tanto al Hammond como al Moog (o similar). Un fiera. Dan ganas de invadir Polonia y Júpiter al oírlo.
"Electric Monk" (6'16) entra en tromba con la clase de un "Leftoverture". Melodías trabajadas y claro exponente de prog espectacular made un USA, a la vieja usanza. Así, sí. El nuevo batería es de raza pegadora, se conjunta con la firmeza infalible del bajo como si llevaran tocando juntos toda la vida. Master class de ritmo y contundencia. Leonard canta como los ángeles de Los Angeles. Voz muy americana como procede, para un prog-pomp que necesita de ése tipo de frecuencias vocales. Desde las más sutiles y relajadas a las más pasionales y/o rabiosas. Todo feeling. Un micro bien defendido, pardiez.
Dejan un rato a Kansas y se van a tierras verdes de Gentle Giant para "Afourthoughts" (7'31). Síncopas rítmicas, álgebra percusiva, guitar-keys desesperadas y una vuelta al primer Spock's Beard. Aquel del maravilloso "The Light". Y aseguro que reverdecen aquellos días con total efectividad.
Las partes cantadas a lo Shulman Bros son reproducidas a la perfección. Una deliciosa regresión hacia "Three Friends" u "Octopus". Lubrican con más onda pomp e incluso piano jazz. Esto es inmenso señores. Indispensable babero para su escucha.
"St. Jerome in the Wilderness" (8'46) posee toda la marca clásica SB, que a veces recuerda a unos bombásticos Saga. Su break al piano demuestra elegancia por castigo. Benditos castigados. La guitarra brama en este corte con la furia de Alex Lifeson en los 70. Y el Hammond lo empasta todo con tremenda mala uva imperante. Me encanta.
Entramos en el plato fuerte. "The Archaeoptimist" (20'57), una historia distópica sobre una chica ante un mundo apocalíptico. Más o menos el que vivimos. Ted Leonard saca su mejor Steve Walsh y aquí sí que huele a classic Kansas......Qué más quisiera la franquicia resultante! Y con material propio.
Mellotron y Rickenbaker abrigados por el coloso pegador, Nick Potters. Dejan las bases hacia desarrollos instrumentales frescos y lanzados. Sin el estrecho corsé del "qué dirán por sonar a vieja escuela". ESTO es rock progresivo. Un género que ha de ser tratado como tal. La premisa filosofogaitas de que "el prog significa progresar" resulta hoy en día tan pretenciosa y desfasada, como vacía. No. Es un estilo que debe respetarse como se merece. Siempre habrá innovación porque siempre habrá puntos de vista de diferentes músicos. Pero este es un estilo como lo son otros. De todo respeto. Y Spock's Beard lo expresa magníficamente. Sin complejos ni absurdeces "modern" ni nada. Tras esta inmensa suite, aún nos queda "Next Step" (10'58). No sé porqué la han puesto la última si debería ir la primera. Para mi gusto la mejor pieza de un disco de sobresaliente. Una perfecta mezcla de Kansas/Genesis que les ha salido redonda. Algo inusual en estos tiempos. Menudo postre al festín que supone "The Archaeoptimist", te deja más que saciado. Y con una feliz sonrisa.
Uno de los discos del año que se escapa. Un álbum que genera esperanza y muy buen rollo. A winner.
J.J . IGLESIAS
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