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Bateristas en la sombra XVIII: Juan Ángel Sanchez

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 Warlock podrían ser considerados como el primer grupo español de Hard Rock con estética e influencia satánica y ocultista.  Su germen, Necrophagus, oscuro grupo surgió en Madrid en 1974 con Victor al frente quien estaba altamente influenciado por bandas como Black Sabbath, Lucifer’s Friend o Hawkwind y con un sonido que hoy sería considerado como Proto Doom. Durante su corta existencia que abarcó desde 1977 a 1979, Warlock fueron teloneros de la Ian Gillan Band en el Teatro Monumental de Madrid en 1979. También participaron en numerosos festivales y compartieron escenario con grupos y artistas de la época como Burning, Cai, Teddy Bautista & Canarios, Azahar, John Martyn, Eduardo Bort, etc. No obstante la historia de Warlock y el rescate de sus ensayos mediante el sello Guerssen forma parte de las reseñas discográficas de esta misma página Web.  El singular baterista Juan Ángel Sánchez se identificaba con el culto al satanismo en un nivel digno de ser consultado, pero su dislocada

IQ: (Inteligence Quotient) El despertar neoprogresivo - Tales from The Lush Attic 1983

Hay que reconocer la originalidad de este nombre de grupo, porque “coeficiente de inteligencia” no es precisamente lo que se veía en el panorama musical de la década prodigiosa de los 80’s. Haciendo un poco de historia me tocó vivir aquello de primera mano y asistir con dolor de corazón a la degradación paulatina del arte y de la música en todas sus expresiones. La vulgaridad fue la moda, no hasta el extremo surrealista de de hoy día donde parece que todos vivimos en Matrix y en una realidad ausente de todo principio ético y humanista. Supongo que es una cuestión generacional a la que no escapamos nadie y salvo valientes excepciones, cada relevo lleva un grado de estupidez mayor que el anterior. Pero no es la cuestión ahora.      
                                                                                                         En 1983 en España la música se había convertido en una verbena de sanfermines y horrores varios, pero en Inglaterra reinaba la esquizofrenia. Me explico. Por una parte, la moda punk ya había calado lo suficiente, pero la nostalgia de los grupos que hicieron música de verdad en la década anterior todavía calentaba en las cenizas. Añadir las diferentes modas de pop de nuevos románticos con bandas tipo Spandau Ballet o Duran Duran porque el rock clásico iba por otros derroteros y tuvo sus más y sus menos. Aquello fue raro porque nadie daba un duro por hacer una música con un poco de sustancia. Agitando la coctelera surgió algo inesperado: combinando la estética hortera e influencia imperante, pelo cardado, colgantes, maquillajes, hombreras en chaquetilla torera de fantasía, botas deportivas de colorines y un poco de inteligencia a la hora de tocar una guitarra o un teclado, algunos chavales muy jóvenes hicieron su aparición en la escena británica en sitios como el Marquee o el festival de Reading. Algunos de ellos ya hicieron tímidas propuestas entre 1979 y 1982. Se pusieron nombres atrayentes: Silmarillion (luego Marillion), Twelfh Night, Pallas, Pendragon, Haze, Quasar, Tamarisk, Solstice e IQ por nombrar los más conocidos. Hasta unos resucitados The Enid se sumaron a la fiesta. 

De todos ellos hoy día solo IQ ha mantenido una calidad en ascenso y un respeto entre los veteranos amantes del rock progresivo y en concreto del rock sinfónico. Los demás o han desaparecido o la música que hacen hoy como en el caso de Pendragon o Marillion, nada tiene que ver con aquella música inicial. En 1976 y asistiendo a la gira del “A trick of The Tail” de Genesis un adolescente guitarrista llamado Mike Holmes y sus amigos, quedaron marcados para siempre con el estilo de música ensoñadora de aquel fabuloso disco. En realidad todo el neo-prog británico le debe a Genesis el despertar del ave fénix. No sé con exactitud si la traición de unos acomodados Phil Collins, Banks y Rutherford hacia la música que habían creado tuvo algo que ver o no, pero la primera banda “neo” llamada “The Lens” cogió el relevo donde Génesis en 1978 lo había dejado. 

“The Lens” se fundaron en Southampton en 1977 con Mike Holmes guitarra, Peter Nicholls voz y Niall Hayden batería. Deciden montar una banda de rock progresivo en una época muy mala para la lírica. Pronto se les unen el bajista Rob Thompson y el teclista Peter Blackler. Comienzan a ensayar unos temas a medio camino entre Steve Hackett y Pink Floyd con los aspectos más atmosféricos del Camel de la época. Son unos aprendices evidentemente y no llegaron a grabar nada hasta su reactivación en 2001. Los dos últimos integrantes se van y entra un pianista con estudios clásicos llamado Martin Orford. The lens son ahora un trio hasta que Tim Esau al bajo y Paul Cook a la batería llegan en 1981 para convertirse en IQ.

La historia comienza en una Inglaterra difícil para este tipo de música. Ni que decir tiene que la crítica de la época se burló del asunto, sin embargo, la gente asistía a sus conciertos hasta conseguir un notable número de fans hartos de la mierda musical reinante. Aquello se llamó neo-progresivo y se creó un círculo de culto exclusivo. En directo IQ tocan algún cover de Genesis incluso, y medio en broma versiones punkies, tecno, jazz y hasta reggae. Son una banda británica que además destila un buen sentido del humor que nunca han abandonado. El Marquee londinense es un garito muy pequeño y guarrete donde comienzan a citarse todas las bandas emergentes mencionadas. Las grabaciones demo de aquella época son terribles realizadas por fans con cassetes cutres, pero documentos históricos para frikis recalcitrantes. IQ logran grabar una cassete en estudio con sus primeros temas propios. 




“Seven Stories Into Eight” (1981-82) hoy ilocalizable pero afortunadamente regrabada por el grupo e incluyendo la versión original en un doble Cd en 1998. Este cassete tiene piezas muy bonitas e increíbles para el momento en que se grabaron y en un estilo inicial que prácticamente nunca han abandonado. Piezas como “About Lake Five” la preciosa “Inteligence Quotient” “For Christ Sake” “Fascination” o “It All Stop Here” ya son clásicos que tocarán en directo durante toda su carrera.

 En 1983 consiguen un contrato discográfico con el sello “The Major Record Company” y registran su primer LP bajo el título de “Tales from The Lush Attic”. La bonita portada es un dibujo de Peter Nicholls a tinta con puntillismo y además se permiten el lujo de grabar largas composiciones. Este “Tales” es un hermoso fresco genesiano que incluso con el paso del tiempo suena precioso. Peter Nicholls emula en directo la cara pintada de Gabriel pero su voz es muy diferente menos oscura y más potente y aguda. No pueden evitar su fuerte influencia, pero aun con todo, la música es muy personal. Tiene su toque de originalidad. Una suite de 20 minutos como “The Last Human Gateway” es inconcebible en 1983. Pero sucede y de que manera. La instrumentación es puramente analógica: mellotron, órgano, moog, string chorus, acústicas etc… La “hackiana” guitarra de Holmes es esplendorosa, las melodías muy acertadas y el ambiente muy sinfónico. 



El disco no tiene desperdicio: “Awake and Nervous” 8 mtos , “The Enemy Smacks” casi 14 mtos etc… una alegoría a las drogas y a la desesperación y miseria urbana  que tanto destrozo humano hicieron en los 80´s. Yo conseguí este disco de propio en un viaje a Barcelona nada más salir recién importado. Ni estaba en las tiendas. Yo tenía ciertos contactos afortunadamente.  Me lo vendieron y no recuerdo el precio (caro supongo) en una distribuidora de importación en un almacén perdido de barriada y me alegró el día. ¡¡¡Que cosas hacíamos de jóvenes y con qué entusiasmo!!!
Alberto Torró



Temas
1.The Last Human Gateway – 19:57
2.Through the Corridors – 2:35
3.Awake and Nervous – 7:45 ❗Put Playback to 0.75 to hear propely!
4.My Baby Treats Me Right 'Cos I'm a Hard Lovin' Man All Night Long – 1:45
5.The Enemy Smacks – 13:49
6.Just Changing Hands – 10:18






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Comentarios

  1. A mi este disco me encanta también. Como bien dices el neoprogresivo nació de esas brasas todavía encendidas que habían quedado de los 70, saliendo buenos grupos, como este. Pero es cierto también que el neoprog empezó a apoltronarse a finales de los 80 y comenzaron a salir grupos como setas que escuchado uno escuchados todos, haciendo perder mucho interés en él.

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  2. Y también en los 90´s y 2000´s. Los imitadores empezaron copiando a los que copiaban y las bandas en general son y fueron muy aburridas y mediocres. No soy muy aficionado al neo prog y realmente IQ son la excepción. A ellos no les gusta la etiqueta. Se consideran una banda progresiva clásica y tienen razón.
    Un saludo Juan Carlos.

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  3. Las bandas ochenteras fueron indebidamente comparadas con Genesis. Es verdad que bebían mucho de ellos pero por ejemplo Arrive Alive de Pallas, The Ceiling Speak de Teelfth Night y Assassing de Marillion tienen mucha influencia punk.
    La idea de que el neoprog ochentero es una copia a genesis es solo desinformacion, es una idea falsa y carente de fundamento. El neo prog de los 80 tomo los sonidos de Genesis, Pink Floyd, Camel, Rush etc. y los fusionó con la música y el espiritu de la época.
    Fueron las bandas de los 90 como Flower Kings y Spock's Beard quienes trataron de plagiar a las bandas originales al punto de buscar teclados vintage.
    El Ethos de Twelfth Night, Pallas, Marillion e IQ está representado más en Porcupine Tree que en cualquiera de las bandas Prog modernas.
    Recordad que Brave de Marillion fue inspiración para OK Computer y que Matt Bellamy ha citado a Pallas como influencia

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