Entrada destacada

JULIAN JAY SAVARIN - Waiters on the dance (1971)

Imagen
  Un año después de su lanzamiento inicial, volvieron a la carga con este nuevo LP en la línea del anterior. Basado en la novela escrita por Julian, hace que estemos ante un disco conceptual de carácter dramático. Una novela de ciencia ficción con tintes oscuros y acontecimientos nada positivos, que arrastran a la humanidad a paisajes e historias apocalípticas. En esta ocasión el músico dominicano no contó con el mismo personal del álbum anterior. De la voz femenina se ocuparía Lady Jo Meek, hermana de Anna integrada en la banda CATAPILLA. Una voz más cercana a la de Annie Haslam pero sin llegar a sus agudos, ni su profundo fondo. Este sería el álbum perteneciente al segundo libro de una trilogía; el tercer libro llegó más adelante pero no llegó nunca a completarse con una banda sonora. El vinilo arranca con teclados graves, mareas de teclado que fluyen en olas y olas, que por sus características interpretativas estaría considerado como un progresivo muy crudo, naciente, dentro de ...

Iskander - Boheme 2000 (1986)

 Otra banda producto de los 80´s aunque creada en 1973. Escuchando este su primer trabajo nadie diría que pertenece a la década que vio nacer al neo prog. En el 88 y el el 90 vendrían dos discos más. Sorprendentemente la música de este disco es lo más alejado de la corriente prog de los 80´s y del formato canción-desarrollo con vistas a que el oyente se quede con la película y tatararee los temas.



 En una primera escucha la música de Iskander no te va a permanecer en la memoria. Esto puede ser bueno o malo dependiendo de lo que busques. Una música que no entra a la primera con facilidad siempre deja a uno perplejo y no porque lo que oyes sea raro o complicado. En absoluto. Estos alemanes se dejan escuchar muy bien pero su música es compleja y necesita atención. Al menos la suficiente para no hacer a priori una falsa sentencia. Aquí se mezclan muchas influencias por una parte y un intento de ser original por la otra. Vas a oír un arco que va desde la fusión jazz, al rock, a la música clásica, al folk acústico pastoral y hasta a la electrónica con reservas. El problema de la música o las músicas que quieren desplegar muchos colores o matices es quizás la falta de concreción. Es quizás la única pega que pondría a las por otra parte sugestivas composiciones de la banda.

 Estoy escribiendo esto a la par que voy escuchando. De momento todo es instrumental, indefinido pero muy bien tocado y realizado. Aparecen casi todas las bandas por mi cabeza, pero de momento ninguna melodía que sea destacable o definitoria. Frialdad técnica… puede ser. Aburrido a veces… sin duda para algunos. No me atrevería a decir tanto porque las estructuras están cambiando constantemente y los músicos son muy capaces. Se me antoja que serán necesarias varias escuchas más. A decir verdad tuvieron narices de grabar esto mediados los 80´s. 

La sorpresiva tercera pieza es un cachondeo cantado-hablado en alemán sin sentido ni razón. Dura menos de tres minutos por fortuna. En el quinto track cambian por completo el estilo recordándome mucho a las piezas pseudo psych de los primeros Grobschnitt del Solar Music con sintes revoloteando y guitarras con delay porrero nada que ver con el principio. También a veces parece que se han escuchado las bases cortantes de los Gente Giant. Un poco de aquí otro de allá. Los entendidos del prog moderno a esto le llaman crossover o related, etc.

 Es un trabajo que dura 71 mtos. Muy largo y no sabría decirte como fue editado si en vinilo o ya en CD. Da lo mismo. Probablemente tenían acumulado mucho material y alternan piezas muy largas con otras muy cortas. La base sonora son Guitarras y teclados con largos desarrollos cuando toca y algún capricho según la cerveza que lleven. Voy por más de la mitad y efectivamente todo es instrumental y muy germano. Es decir no hay emoción melódica británica en ningún momento pero tienen su cosa. Especialmente a los que os gustan las frialdades y los cuelgues sicodélicos. Las variaciones y caprichos se suceden. Esto me recuerda a cuando te juntas con gente a tocar y preguntas que hacemos…? Sobre la marcha y… ya vamos viendo. Llego a la pieza número nueve “The Greed” y aparece la primera voz que me recuerda a algún cantante de Canterbury. Piano eléctrico y primera melodía reconocible pero enseguida consiguen que las instrumentales peculiaridades afloren, lo cual no está mal porque no son previsibles.



Es un disco curioso. Imagino que como la mayoría de los que voy comentando complicado de localizar. Para coleccionistas claro está y especialmente para los locos prog habituales que papa y mamá echaron antaño de casa por insoportables, pesaos y cansinos.

Alberto Torró



¿Te gustó el artículo? No te pierdas de los próximos artículos 



Vuestros comentarios son nuestra energía











Comentarios