A día de hoy al igual que otras muchas cosas, está tan desvirtuado todo que creo conveniente aportar algo de luz, para que los tipos de estilos progresivos y sus alegres etiquetas caprichosas no se mezclen entre el exceso de propuestas que aparecen y que además la gente más joven no se pierda constantemente en un mar de confusión. Dando por hecho que por un milagro de la sensibilidad y la sensatez opte por escuchar una música que tenga unas directrices muy concretas. Todo ello con el fin de que se aclare algo y diferencie lo que es una banda de “rock” y lo que es una banda “prog”. Las líneas están hoy tan desdibujadas y con tanta especia artificial para disimular el sabor que la confusión es fácil tenerla si te estás iniciando en ello y desde luego la información y las múltiples etiquetas que ponen a cada producto no ayuda a ello. Naturalmente no todo lo que entra por los oídos tiene el mismo efecto en la gente que escucha música. En los años sesenta-setenta y aunque esto pu...
Obtener enlace
Facebook
X
Pinterest
Correo electrónico
Otras aplicaciones
GIZMO - Just Like Master Bates (1979 / Ace)
Obtener enlace
Facebook
X
Pinterest
Correo electrónico
Otras aplicaciones
Procedentes de Canterbury, Gizmo se enfrentó a un debut demasiado tardío para sus intenciones. A pesar de que todo comenzó con un single editado por David Radford (voz, guitarras), en 1975. Animado por las buenas críticas, funda Gizmo junto a Maurice Memmott (Fender Rhodes, Farfisa organ, violin), y Steve Wyse (batería y percusión), entre el 77 y 79. Es en ése último año cuando editan el extrañamente presentado, "Just Like Master Bates". Añaden para la grabación a Brian Gould (MiniMoog, Farfisa organ y Clavinet) y Trevor Rogansky (bajo).
El problema con Gizmo es que las continuas separaciones/reuniones han diluido una carrera errática, que no en lo creativo. Hasta tres o cuatro de éstos parones podemos encontrar en su biografía. A veces con sorprendentes nombres, como en la reforma del 95, que contaron con Hugh Hopper al bajo. En el 84 (y tras otra reunión), hacen una gira con unos Ozric Tentacles primigenios, con Martín Reed (guitarras), fallecido en 2011. Cinco son los discos que comprenden su discografía, y que responden a los años 1979, 1981, 1992, 2012 y el último, "Marlowe's Children", de 2015. Irregular andadura, como puede verse. Puede que por eso no sean tan conocidos como otros de sus vecinos. Hoy traemos su debut, como buen referente para comenzar con Gizmo.
"Gravity Brings You Down" (4'36) deja en evidencia su procedencia, con juguetón Rhodes y voces psych de marcado carácter. El violín los sitúa cerca de unos Caravan de mediados 70, inequívocamente. El ambiente de "Long Gone Song" (5'20) deja entrever fuertes querencias Art Rock paralelas a unos 10CC, aunque el terruño canterburyano tira de lo lindo. Las ideas se les agolpan, se nota a la legua. Van sobrados de inesperados y bonitos detalles. Otra joyita es "Storyteller" (4'10), que podría estar profetizando el neo-prog perfectamente. El sólo de MiniMoog y el tratamiento teclistico es exquisito. Una pequeña belleza. Campestre y acústico feel nos trae "Those Lying Eyes" (6'08), otra con aires de Caravan y hasta un sentido naif hecho a propósito. .....sólo en apariencia. La composición está muy trabajada. Pero ése es otro de los engañosos factores del Art Rock.
"Kismet" (9'20) posee un cierto aire trágico genesiano. "Hourglass" (5'04) ataca un particular modo estratégico que bascula entre el classic prog y ritmos ligeros más del momento. En "Not that Far To Go" (4'26) podrían ser los Pavlov's Dog británicos, quizá no con la voz imposible de David Surkamp, pero sí con cierto parecido en las maneras. Hay cambios de ambiente y texturas, algún golpe experimental, batería sin desperdicio y unos magníficos teclados. Me inspiran también a Cardiacs, It Bites, Pendragon.....Y cosas inmediatamente venideras. "Come the Day" (2'50), con ésa viola de igual sonoridad que Geoffrey Richardson, vuelve a recordarnos su procedencia hippie, rural e idílica. Preciosa rola con acústicas, Farfisa y Caravan feel en estado puro. Una de mis destacadas. El truculento rock arty aparece ahora con "Dance of the Emmets" (2'56). Brian Gould juega aquí a ser una mezcla de Giorgio Moroder y Tony Banks. De algún modo, también están ejerciendo de Nostradamus del synth-pop con éste instrumental! Y los resultados abofetean, por originales. En "One and One is Two" (3'06) son de nuevo los "Pavlov's Dog de Canterbury", con ése melancólico tono vocal y Rhodes protagonista. "Onto the Sun" (ya como bonus), sigue esas mismas pautas, y es otra pieza ganadora. Finalizando con otra versión arty de "One and One is Two", más cerca de lo que parece de Ultravox o Tubeway Army.
Gizmo se adelantaron a muchos, y la historia nos dice que ése "atrevimiento" nunca es bueno para el valiente que lo realiza. Con una más firme y consistente formación, quizá en los 80 hubieran triunfado......aunque algo me dice que no con prog rock!!!
Comentarios
Publicar un comentario