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EL PROGRESIVO DEL SIGLO XXI -1: Cyan - Magenta

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 A día de hoy al igual que otras muchas cosas, está tan desvirtuado todo que creo conveniente aportar algo de luz, para que los tipos de estilos progresivos y sus alegres etiquetas caprichosas no se mezclen entre el exceso de propuestas que aparecen y que además la gente más joven no se pierda constantemente en un mar de confusión. Dando por hecho que por un milagro de la sensibilidad y la sensatez opte por escuchar una música que tenga unas directrices muy concretas. Todo ello con el fin de que se aclare algo y diferencie lo que es una banda de “rock” y lo que es una banda “prog”. Las líneas están hoy tan desdibujadas y con tanta especia artificial para disimular el sabor que la confusión es fácil tenerla si te estás iniciando en ello y desde luego la información y las múltiples etiquetas que ponen a cada producto no ayuda a ello.  Naturalmente no todo lo que entra por los oídos tiene el mismo efecto en la gente que escucha música. En los años sesenta-setenta y aunque esto pu...

WILDFIRE - Smokin ( 1970 - 2025 / Out-sider / Guerssen)

 Inacabable e inmensa, la escena underground hard rock USA 70s, sigue dando sorpresas en pleno 2025. Y no lleva camino de terminar. Gracias a labores tan encomiables como las de algunos arqueólogos del tema. Aquí Guerssen se apunta un tanto. Otro.



Wildfire se gesta en los finales 60 en Costa Mesa, sur de California. Lugar y fecha ideales. Lo de siempre, cambios de personal, hasta ajustar la alineación deseada. Un trío definitivo. Randy Love (guitarra, voz), Danny Jamison (bajo, voz solista) y Donny Martin (batería).

Sus primeros conciertos ya explotan....como sus amplis. Un problema que Randy trata de solventar poniéndose en contacto con Pat Quilter, diseñador de amplificadores a prueba de cafres. Éste le fabrica uno con pre-amplificador, el "Master Volume Dial". Si hubieran conocido nuestros "Sinmarc".......Pero ya tienen su arma de dominación  mundial. Artefacto de destrucción masiva neuronal para desatar killer hard rock y envenenado heavy psych, a sus anchas. Wildfire se hacen populares por su zona, a base de conciertos rotundos y el apoyo de The Hessians Motorcycle Club. Encantadores moteros de los de entonces. Nada de postureo, cuidadín.

Un promotor les propone un traslado a Austin, y aceptan devastar con su fuego salvaje las llanuras de Texas. Abren para Johnny Winter, Freddie King, Allman Brothers o ZZ Top, y aquello debió de ser memorable.

Es 1970 y entran a grabar en Sonobeat Studios (como Mariani), un vinilo-demo, 1000 copias en carpeta blanca numerada. Sólo puesto a la venta en una pequeña tienda de discos californiana, se convierte en el clásico Grial coleccionista de los jodidos. Más todavía a partir de su separación en 1972.

Pero entremos en sus surcos. "Stars in the Sky" (5'45) exhibe poder hard blues rock desde el primer segundo. Tres tíos que tocan con hambre de reconocimiento se perciben enseguida. Excelente voz macho-alfa y rítmo colosal. Guitarra solista realmente imaginativa y en consonancia con los grandes. Nada amateur hay aquí. Arreglan con filigrana y, hey, no suenan deja-vu! Más bien a clásico material de ése con el que has crecido desde crío.  Riffs proto-jazz rock a la Tommy Bolin y un bajo Triceratops, apuntalan con percusión superlativa, y fijación por el detalle minucioso. La primera y ya estoy convencido.

La construcción en "Down to Earth" (4'33) tiene símil con Mountain, ésos grandes olvidados. Las voces armonizan, y el cuerpo del tema es claramente proto-prog, sección hard. No son unos brutos mecánicos.  Éstos tíos pensaban muy mucho su exposición decibélica. Todos mis respetos.

Tratan de sorprender a cada corte, y nuevamente lo consiguen en "Time Will Tell" (3'10). Donde la melodía psicodélica es adecuada en el contexto "cremoso". Con órgano,  sonaría a Vanilla Fudge. Pero como no hay, y el soul es evidente, los primeros Grand Funk Railroad me parecen una certera descripción. 

"Don't Look for Me" (6'27) conserva herencia y poso Hendrix. Lo suyo estaba cercano aún. Y juro que me suenan aquí como un power trío 20 años por delante en el futuro, King's X. Los instrumentos parlotean efusivos en una bomba con esencias de funk negroide, en hard psico nuclear andamiaje. Randy Love era un guitar-hero nacido para triunfar.

Doy la vuelta a la rodaja y me sale "Free" (2'59), con inesperados y sutiles arreglos, dentro de una soldadura rítmica precisa. Sin embargo cuenta con acústicas y southern feel, no alejada de los primeros Point Blank. Preciosa.

Basszooka-intro para "What Have i Got Now" (3'21). Mark Farner y asociados (traidores) invocados, con la pureza del momento. No puedo creer que nadie se fijara en Wildfire para algo grande. Lo tenían todo.

Crema ácida viene con "Let it Happen" (3'06), equilibrada con melodiosa brisa californiana. Suenan con músculo,  pero nada bestia, histriónico ni hostil. Una gran virtud en la banda. Inteligencia, se llama.

La final "Quicksand" (10'58), con su introductoria cowbell, convierte al bicho en Mountain con Mark Farner a la voz. Un temazo que pudo estar en "On Time", "El Rojo", "Closer to Home", "Survival" o "E Pluribus Funk". Con un solo de bajo-mastodonte, poniendo a prueba los amplis ésos de Los Picapiedra. Su aptitud y buen gusto rubrican un álbum excepcional. Buen rock de su tiempo y auténtica esencia de lo que fueron los 70.



Wildfire hicieron alto honor a su nombre con un disco estratosférico que nunca llegó a ser. Hasta ahora.

J.J. IGLESIAS


Temas
01. Stars in the Sky
02. Down to Earth 
03. Time Will Tell 
04. Don't Look for Me 
05. Free
06. What Have I Got Now
07. Let It Happen 
08. Quicksand


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